El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dio por finalizadas las negociaciones comerciales con Canadá el jueves 23 de octubre. El motivo: un anuncio televisivo canadiense que utilizaba fragmentos del discurso del expresidente Ronald Reagan sin autorización, lo que Trump calificó de “comportamiento atroz”.
Trump afirmó que el anuncio, de aproximadamente 75 millones de dólares, buscaba interferir con decisiones jurídicas de la Corte Suprema y otros tribunales de EE.UU. “El anuncio era por 75 millones de dólares. Lo hicieron solo para interferir con la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos y otros tribunales”, declaró. En consecuencia, reiteró que los aranceles —que considera esenciales para la seguridad nacional y la economía estadounidense— seguirán vigentes.
rump escribió en su red social: “Based on their egregious behavior, ALL TRADE NEGOTIATIONS WITH CANADA ARE HEREBY TERMINATED.”
La decisión generó inmediatez en los mercados: el tipo de cambio entre dólar estadounidense y dólar canadiense subió cerca de un 0.14 por ciento en la última hora tras el anuncio.
El conflicto no se limita al anuncio en cuestión: desde febrero de 2025 ambos países ya estaban sumidos en una fuerte disputa comercial. Canadá acusaba a EE.UU. de imponer aranceles excesivos sobre acero, aluminio y automóviles; EE.UU. exigía mayor participación estadounidense en suministros canadienses y mejoras en control fronterizo y seguridad.
¿Por qué este anuncio detonó la crisis?
La polémica radica en que el gobierno de Ontario, con aprobación pública, lanzó un anuncio que incluía audio de un discurso de Reagan de 1987, sin el permiso del Ronald Reagan Foundation. Esta fundación denunció la manipulación del mensaje original y advirtió que evaluará acciones legales.
Para Trump, esto fue el catalizador definitivo para cortar por completo cualquier diálogo comercial con Canadá. Reiteró que los aranceles son un instrumento de defensa para la industria y la soberanía estadounidense.
Consecuencias comerciales y diplomáticas
La ruptura podría acentuar las tensiones diplomáticas entre los dos países. Canadá exporta una gran parte de su producción a EE.UU.; cualquier interrupción podría afectar industrias como automotriz, acero y aluminio. Además, la relación comercial Canadá-Estados Unidos es de las más densas del mundo. Wikipedia
Por su parte, el primer ministro Mark Carney comentó que “Canadá no puede controlar la política comercial de Estados Unidos”, reconociendo la dificultad de replantear la situación inmediata.
Conclusión
La decisión de Trump marca un punto de inflexión en la relación comercial entre EE.UU. y Canadá. Lo que comenzó como una disputa por aranceles se ha transformado en una ruptura abierta motivada por un anuncio polémico. Las implicaciones para la economía norteamericana y global pueden ser de largo alcance, y será clave seguir los próximos pasos de ambos gobiernos.

