Un cliente de una zapatería en la Ciudad de México solicitó la clausura del establecimiento luego de que el zapatero se negara a llamarle «señorita».
Según el cliente, identificado como Meli Panda, el conflicto se originó cuando el zapatero le pidió la nota del trabajo que debía entregar para poder realizar el arreglo de sus zapatos. Meli Panda argumentó que no tenía la nota, pero que podía explicarle lo que necesitaba.
El zapatero, sin embargo, se negó a atenderle sin la nota, lo que provocó una discusión entre ambos. Meli Panda acusó al zapatero de tratarle con agresividad y de negarse a respetar su identidad de género.
La discusión escaló hasta involucrar a la Guardia Nacional, que intervino pidiéndole a Meli Panda que abandonara el lugar.
El caso ha generado un debate en redes sociales sobre el respeto a la diversidad y las preferencias de identidad. Algunos usuarios apoyan la posición de Meli Panda, argumentando que es importante respetar la identidad de género de las personas. Otros, sin embargo, cuestionan si debemos o no acceder a estas demandas identitarias.
El incidente subraya la creciente importancia del respeto a la diversidad en la sociedad actual. El debate sobre cómo abordar estas situaciones apenas está comenzando, y los incidentes como este seguirán generando reflexiones sobre la convivencia respetuosa en la sociedad.