Unión Europea prohíbe sustancias tóxicas en esmaltes y geles de uñas por riesgo de cáncer

Autoridades sanitarias internacionales han emitido una alerta sobre el uso de sustancias cancerígenas en productos cosméticos, específicamente en esmaltes y geles de uñas. La principal preocupación se centra en el óxido de difenilfosfina (TPO), una sustancia incluida en la clasificación de compuestos CMR: carcinógenos, mutágenos o tóxicos para la reproducción.

De acuerdo con especialistas, estas sustancias no solo pueden provocar cáncer o aumentar su incidencia, sino también alterar la estructura cromosómica de las células, lo que constituye una etapa temprana en el desarrollo de la enfermedad. Además, afectan directamente la salud reproductiva, pudiendo provocar abortos espontáneos, malformaciones fetales o infertilidad.

Prohibición en la Unión Europea

Ante la evidencia científica, la Unión Europea prohibió desde el 1 de septiembre de 2025 el uso del TPO en esmaltes y geles para uñas. Según la Comisión Europea, los productos que contengan esta sustancia ya no podrán comercializarse ni distribuirse, aunque hayan sido adquiridos antes de la entrada en vigor de la medida.

Esto significa que tanto comerciantes como profesionales de salones de belleza deberán dejar de usar y desechar los productos que contengan el compuesto. La medida aplica a ventas al por mayor y al por menor, así como a la aplicación directa en clientes.

Evidencias científicas que impulsaron la medida

Hasta 2015, se consideraba que los geles curados con luz ultravioleta (UV) hasta en un 5% no representaban un riesgo significativo para la salud. Sin embargo, nuevas investigaciones han demostrado lo contrario, lo que llevó a la reclasificación de estos productos y a la prohibición definitiva de su uso.

Alternativas más seguras

Las autoridades recomiendan que salones de belleza y usuarios particulares opten por productos alternativos libres de sustancias CMR, garantizando así una práctica cosmética más segura. La industria, por su parte, deberá adaptarse a la nueva normativa, desarrollando fórmulas que protejan tanto la salud de los consumidores como la de los profesionales del sector.