En México, es común que al salir de tiendas como Walmart, Sam’s Club o Costco, el personal solicite revisar el ticket de compra. Aunque esta práctica parece rutinaria, no está permitida por la ley y puede ser denunciada por los consumidores.
De acuerdo con la Ley Federal de Protección al Consumidor, solicitar el comprobante de compra sin causa justificada podría interpretarse como una violación al artículo 10, el cual prohíbe a los proveedores realizar actos que comprometan la libertad, integridad o seguridad del cliente bajo pretextos de verificación.
Un caso emblemático ocurrió en 2024, cuando un cliente fue retenido en una tienda Sam’s Club del Estado de México por negarse a mostrar su ticket. La Suprema Corte de Justicia de la Nación falló a favor del consumidor, sancionando a la empresa con una multa de 200 mil pesos y ordenando el cierre temporal del establecimiento.
¿Qué puede hacer el consumidor?
Las personas afectadas pueden denunciar este tipo de prácticas a través de los teléfonos 55 5568 8722 o 800 468 8722, disponibles de lunes a viernes de 9:00 a 19:00 horas, y fines de semana de 10:00 a 18:00. También se puede enviar un correo a denunciasprofeco@profeco.gob.mx. Se recomienda documentar los hechos y presentar la queja lo antes posible.
Otra práctica sancionable es no entregar el ticket al finalizar la compra. Este comprobante es indispensable para solicitar garantías, devoluciones o aclaraciones, y su omisión vulnera los derechos del consumidor.
El impacto de las experiencias de compra
En un entorno donde las experiencias negativas se viralizan rápidamente en redes sociales, acciones como revisar el ticket sin justificación o retener a los clientes pueden dañar la imagen de las marcas. Según un estudio de Nielsen, el 92% de los consumidores confía más en recomendaciones personales que en la publicidad, y el 70% en reseñas de personas desconocidas.
¿Mostrar el ticket es obligatorio?
Legalmente, no existe ninguna obligación para que el consumidor muestre su ticket al salir. Si hay dudas sobre el pago, el establecimiento debe seguir un protocolo formal que respete los derechos del cliente y no implique su retención.
Este llamado no solo aplica a tiendas como Walmart o Costco, sino también a cadenas como Soriana, Chedraui, Oxxo y otras tiendas departamentales, que podrían incurrir en prácticas similares contrarias a la ley.