Crisis Empresarial: Gruma Bajo la Mira de Cofece y la Pasividad del CCE Desata Controversia

Esta situación ha encendido alarmas en el sector empresarial, ya que se interpreta como un posible precedente de futuras investigaciones que podrían afectar a otras compañías y sectores.

Gruma, la destacada empresa mexicana de alimentos, enfrenta una creciente preocupación tras ser señalada por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) por presuntas prácticas monopólicas. Esta situación ha encendido alarmas en el sector empresarial, ya que se interpreta como un posible precedente de futuras investigaciones que podrían afectar a otras compañías y sectores.

A principios de octubre, la Cofece emitió un dictamen que puso en alerta a Gruma y a otros grupos empresariales. Este informe ha generado un intenso debate interno dentro del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), donde se ha discutido la implicación de estas acusaciones en el contexto de la reciente iniciativa gubernamental que busca debilitar los órganos autónomos. “¿Por qué ocurre esto en este momento? Justo cuando la posibilidad de eliminar los órganos autónomos está sobre la mesa”, comentó una fuente cercana al CCE. “Esta acusación podría haberse hecho antes, pero parece que ahora se están desempolvando otros expedientes archivados”.

Sin embargo, lo que ha llamado la atención de los ejecutivos de Gruma es el silencio del presidente del CCE, Francisco Cervantes, quien no se ha pronunciado al respecto. Este silencio ha sido interpretado como una falta de apoyo hacia la empresa, lo que ha generado malestar entre sus altos directivos. Mientras algunos empresarios argumentan que la falta de un pronunciamiento se debe a que Gruma no es miembro del CCE, otros sostienen que Cervantes está bajo una fuerte presión del sector bancario.

El sector bancario podría ser uno de los más afectados si la Cofece decide intensificar sus investigaciones antimonopolio, lo que lleva a algunos en Gruma a suponer que los banqueros han pedido a Cervantes evitar hacer ruido y mantener el debate sobre monopolios fuera de la esfera pública.

El impacto de esta situación ha sido inmediato en los mercados. Tras el anuncio de la Cofece, las acciones de Gruma en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) experimentaron una drástica caída de más del 6%. Además, el último reporte financiero de la empresa reveló una disminución del 4.2% en sus ventas durante el penúltimo trimestre del año, atribuida a ajustes de precios en México.

En una reciente conferencia con analistas, Gruma confirmó que está considerando las recomendaciones de la Cofece para vender cinco de sus 18 molinos de harina de maíz nixtamalizado. La empresa ha indicado que estos activos serán evaluados para una posible desincorporación en un plazo máximo de dos años, dependiendo de la resolución final de la Cofece y del agotamiento de los recursos legales disponibles.

La situación en Gruma destaca no solo la tensión entre las empresas y los reguladores, sino también las dinámicas de poder dentro del sector empresarial en México. A medida que la investigación avanza, el sector privado estará atento a cómo se desarrollan estos acontecimientos y a las implicaciones que puedan surgir para otras empresas.