La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó que el precio máximo de la gasolina Magna permanecerá en 24 pesos por litro, tras renovar el acuerdo con empresarios gasolineros que representan al 98% de las estaciones de servicio del país.
El anuncio se realizó en Palacio Nacional, donde la mandataria explicó que este pacto, aunque voluntario, busca proteger la economía familiar y garantizar estabilidad frente a la volatilidad internacional del petróleo.
Acuerdo voluntario, pero con impacto nacional
El acuerdo original fue firmado el 27 de febrero de 2025 como una estrategia temporal de seis meses para estabilizar los precios. Su renovación demuestra que la colaboración entre gobierno e iniciativa privada puede funcionar sin necesidad de controles obligatorios, los cuales en otros países han generado conflictos.
Al ser cuestionada sobre el 2% de gasolineras que aún no se suman, Sheinbaum señaló que no existe un mecanismo legal para obligarlas. Sin embargo, destacó que los consumidores pueden optar por estaciones adheridas al pacto, lo que en la práctica presiona a las demás a alinearse para no perder clientela.
Beneficios para automovilistas y la economía
De acuerdo con Sheinbaum, mantener el precio en 24 pesos por litro evita aumentos abruptos en zonas estratégicas y actúa como un “escudo contra la inflación”, al proteger el bolsillo de millones de automovilistas que dependen del combustible para su trabajo diario.
En redes sociales, la mandataria agradeció a los dueños de gasolineras su disposición para mantener el compromiso, resaltando que esta política representa un ejemplo de cooperación público-privada en beneficio del país.
Perspectivas a futuro
Aunque el pequeño porcentaje de estaciones fuera del acuerdo opera principalmente en zonas con poca competencia, el gobierno confía en que la presión del mercado las obligará a adherirse. En caso contrario, se podrían aplicar esquemas alternativos como las Gasolinas Bienestar en algunas regiones.
Con esta renovación, México mantiene una de las políticas más amplias de estabilización voluntaria de combustibles en Latinoamérica, enviando un mensaje de certidumbre a consumidores y empresarios en un entorno económico marcado por las tensiones comerciales con Estados Unidos.