Muere hombre tras accidente con barra de entrenamiento en gimnasio de Brasil

Un hombre de 55 años murió al interior de un gimnasio en Brasil después de sufrir un fuerte impacto en el pecho mientras realizaba un press de banca con una barra de entrenamiento. El incidente, ocurrido en el gimnasio Olinda, fue captado por una cámara de seguridad y posteriormente difundido en redes sociales, donde generó indignación debido a la ausencia de supervisión profesional durante el ejercicio.

La víctima fue identificada como Ronald José Salvador Montenegro, quien aparece en el video levantando la barra repetidamente antes de que esta se le resbalara de las manos y cayera con fuerza sobre su pecho. A pesar del golpe, el hombre logró incorporarse de inmediato, lo que inicialmente hizo pensar que había resultado ileso. Sin embargo, segundos después, se desplomó mientras se tocaba el pecho, ya sin mostrar señales de vida.

El accidente ocurrió el 1 de diciembre, pero se hizo público cuando el equipo de Atención de Emergencias de Río Doce confirmó la muerte del hombre. Paramédicos arribaron al lugar tras recibir el reporte del incidente y declararon el deceso al comprobar que Montenegro no respondía. En redes sociales, el caso ha desatado un debate sobre las medidas de seguridad en gimnasios y la importancia de contar con supervisión, especialmente cuando se manejan grandes pesos.

Familiares de la víctima declararon a medios locales que Ronald no contaba con la supervisión de un entrenador, lo que pudo haber incrementado el riesgo del ejercicio y dificultado que recibiera ayuda inmediata. También señalaron que el establecimiento no contaba con personal capacitado presente en el área al momento del accidente.

La tragedia reabre la conversación sobre la necesidad de protocolos de seguridad más estrictos en gimnasios, así como de capacitación obligatoria para evitar accidentes fatales durante rutinas de alto esfuerzo. Hasta el momento, las autoridades locales no han informado si se abrirá una investigación formal contra el gimnasio.

Brasil enfrenta crisis sanitaria por bebidas adulteradas con metanol

Las autoridades sanitarias de Brasil emitieron una alerta nacional tras confirmarse dos muertes y más de 200 casos sospechosos de intoxicación por bebidas alcohólicas adulteradas con metanol. El consumo de destilados manipulados de forma ilegal, entre ellos la caipirinha, ha encendido las alarmas por el riesgo sanitario que implica esta sustancia.

El metanol, también conocido como alcohol de madera, es un compuesto químico altamente tóxico que suele usarse en procesos industriales. Su incorporación intencional en bebidas con fines económicos representa una práctica clandestina con consecuencias letales.

¿Qué es la intoxicación con metanol?

La intoxicación ocurre al ingerir este compuesto, que a diferencia del etanol (alcohol común de las bebidas), resulta mortal en 40% de los casos incluso con atención médica. Según expertos en toxicología como Francisco Dadic y Carlos Damin, el metanol puede encontrarse en licores caseros, destilados adulterados y bebidas de bajo costo vendidas en circuitos informales.

Uno de los principales riesgos es que el metanol no tiene color, olor ni sabor, lo que dificulta su identificación sin un análisis de laboratorio.

Síntomas de intoxicación por metanol

Los signos pueden aparecer entre 40 minutos y 72 horas después de la ingesta. Entre los síntomas más frecuentes se encuentran:

  • Náuseas, vómitos y dolor de cabeza.
  • Sensación de embriaguez distinta a la habitual.
  • Trastornos visuales como visión borrosa, diplopía o ceguera.
  • Acidosis metabólica y falla multiorgánica.
  • En casos graves, coma y muerte.

La afectación del nervio óptico es uno de los daños más característicos, lo que explica la alta frecuencia de pérdida de visión permanente en los casos reportados.

Tratamiento y prevención

El tratamiento inmediato es fundamental. El fomepizol es el antídoto de elección, aunque su disponibilidad en Brasil es limitada. En su ausencia, se emplea etanol farmacéutico como alternativa terapéutica.

La prevención es la mejor herramienta: evitar el consumo de bebidas de origen dudoso, comprar solo en comercios regulados y denunciar productos sospechosos ante las autoridades.