La reforma a la Ley de los Impuestos Generales de Importación y Exportación (LIGIE) llegará esta semana a la Cámara de Diputados con modificaciones importantes, luego de que las mesas de trabajo entre el Gobierno y la iniciativa privada permitieran ajustar varios de los aranceles originalmente planteados.
Funcionarios cercanos al proceso, que solicitaron anonimato, confirmaron que el dictamen incluye “reducciones y ajustes en diversas fracciones arancelarias” para sectores como el manufacturero, automotriz, metalmecánico, textil y bienes de consumo.
Aunque la iniciativa forma parte del Plan México, cuyo objetivo es disminuir la dependencia de importaciones asiáticas, el diálogo con la industria logró suavizar parte del impacto inicial.
Ruta legislativa: votación prevista para el 9 de diciembre
El proceso avanza con calendario firme. La Comisión de Economía, Comercio y Competitividad sesionará el 8 de diciembre, y el dictamen será votado en el Pleno el 9 de diciembre, según fuentes legislativas.
Para varias cámaras empresariales, el ajuste es insuficiente. Expertos advierten que los aranceles seguirán siendo elevados y generarán efectos económicos considerables.
Industria advierte riesgos: aumento de costos y menor competitividad
Brenda Ángeles, gerente jurídico de CASADUANA, señaló que pese a los argumentos técnicos presentados por la industria, el Gobierno mantiene su objetivo de encarecer las importaciones asiáticas para fortalecer la producción nacional.
Esto representará un incremento de costos que inevitablemente se trasladará al consumidor final, además de obligar a las empresas a replantear presupuestos y estrategias para 2026. La especialista también alertó que la reforma ya genera incertidumbre entre empresas y potenciales inversionistas.
La medida, explica, replica parcialmente la estrategia comercial de Estados Unidos: imponer aranceles no solo a China, sino a cualquier país sin tratado comercial con México.
México, altamente expuesto frente a China
El consultor en comercio internacional Jorge Molina Larrondo advirtió que el alza arancelaria tendrá efectos políticos y económicos negativos. Subrayó que 77 % de las importaciones mexicanas son insumos y bienes intermedios, por lo que elevar los aranceles aumentará los costos de producción y podría convertirse en un “freno” para el crecimiento del PIB.
Molina alertó también sobre la vulnerabilidad de México ante China:
- 39 % de las importaciones mexicanas provienen de países sin TLC.
- De ese porcentaje, 20 puntos corresponden a China.
- Esto significa que México depende el doble de China que Estados Unidos, ya que los estadounidenses importan solo 9 % desde ese país.
El especialista recordó que China ya ha advertido que responderá al incremento unilateral de aranceles.