La inflación general de México habría repuntado durante la primera quincena de noviembre, luego de dos periodos consecutivos a la baja, de acuerdo con un sondeo realizado por Reuters. Este repunte llega en un momento clave en el que los mercados financieros mantienen expectativas de que el Banco de México (Banxico) podría aplicar un nuevo recorte a su tasa de interés referencial antes de que concluya el año.

Según la mediana de las proyecciones de 10 analistas consultados, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) habría aumentado a 3.56% anual durante la primera mitad del mes. El dato mostraría una ligera aceleración respecto a las quincenas previas, aunque aún dentro del rango de variabilidad establecido por Banxico de 3% +/- un punto porcentual.

En cuanto a la inflación subyacente, que excluye bienes y servicios con precios más volátiles, las estimaciones apuntan a que se habría mantenido estable en 4.32% anual. A pesar de no mostrar cambios significativos, este componente continúa por encima del objetivo oficial, lo que refleja la persistencia de presiones inflacionarias en sectores clave de la economía.

Respecto a la quincena inmediata anterior, el sondeo anticipa que los precios al consumidor habrían aumentado 0.42%, mientras que la inflación subyacente registraría un incremento marginal de 0.05%. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicará los resultados oficiales el lunes.

Este comportamiento inflacionario se da tras la reciente decisión de Banxico de reducir su tasa de referencia por undécima ocasión consecutiva, ubicándola en 7.25%. Aunque la Junta de Gobierno adoptó un tono más prudente sobre futuros recortes, dejó abierta la posibilidad de continuar flexibilizando la política monetaria.

De acuerdo con las minutas más recientes, la mayoría de los miembros de la Junta consideró que el debilitamiento de la economía mexicana podría contribuir a moderar las presiones inflacionarias, permitiendo mayor margen para disminuir el costo del crédito. La gobernadora Victoria Rodríguez señaló en una entrevista que ve “altamente probable” un nuevo recorte de 25 puntos base en la decisión de política monetaria programada para el 18 de diciembre.

En línea con esta postura, una encuesta de Citi anticipa que la tasa de interés podría cerrar el año en 7%, reflejando una expectativa generalizada de mayor relajación monetaria en los próximos meses.