La emblemática fábrica de pinturas para zapatos ‘El Oso’, ubicada en la colonia Portales Sur, alcaldía Benito Juárez, en la Ciudad de México, fue desalojada la noche del viernes 17 de enero en un operativo de autoridades locales. Esta empresa, con más de 100 años de existencia, ha sido un referente en la industria del cuidado del calzado, pero recientemente se vio envuelta en un desafortunado episodio que ha generado gran controversia.
¿Por qué desalojaron la fábrica ‘El Oso’?
El motivo del desalojo de ‘El Oso’ aún no ha sido confirmado por las autoridades de la Ciudad de México. Sin embargo, diversos informes en redes sociales y medios locales indican que las pertenencias de la fábrica fueron dejadas en la calle tras el operativo. Vecinos de la zona informaron que se llevaron algunos de los objetos dejados a la intemperie, lo que agudizó la polémica.
Por su parte, la empresa se pronunció oficialmente a través de un comunicado emitido la mañana del sábado, donde aclaró que el desalojo ocurrió debido a que no cedieron ante extorsiones del crimen organizado, la competencia desleal y las autoridades corruptas. ‘El Oso’ destacó su compromiso con la calidad y la historia de la empresa, asegurando que no se rendirán y que continuarán operando con fuerza a pesar de las adversidades.
El legado de ‘El Oso’ en la Ciudad de México
La fábrica fue fundada por Prisciliano Pérez Buenrostro , originario de Jalpan, Querétaro, a principios del siglo XX. Según la historia oficial de la empresa, Pérez Buenrostro encontró la fórmula perfecta para la preservación y embellecimiento de calzado y artículos de piel. En 1918 fundó formalmente la empresa, que fue constituida oficialmente el 6 de enero de 1922. El nombre ‘El Oso’ hace referencia al período postrevolucionario en México, cuando las personas observaban con asombro y fascinación los restos del país y la imagen de un oso. polar.
El desalojo y su impacto en la industria local
El desalojo de una empresa con tanta historia genera incertidumbre en el sector y plantea serias preguntas sobre el entorno de negocios en la Ciudad de México. Las declaraciones de la empresa resaltan la difícil situación que enfrentan muchos negocios en la capital debido a la inseguridad y las amenazas constantes de extorsión.
La alcaldía Benito Juárez, por su parte, se deslindó del desalojo, aclarando que no participó en el operativo.
Un futuro incierto para ‘El Oso’
A pesar de los desafíos, la empresa se comprometió a seguir adelante con su misión de más de 100 años, brindando productos de calidad para la preservación del calzado. La resiliencia de ‘El Oso’ se mantiene firme, mientras la comunidad espera más información sobre el futuro de esta histórica fábrica en la Ciudad de México.